Adoro las preguntas de este programa (y no soy la única, que hay un grupo en Facebook y todo... aunque, pensandolo bien, no es ningún mérito, ya que hay grupos hasta de quienes duermen en la cama). Estas preguntas capaces de acabar con relaciones personales y carreras profesionales en un abrir y cerrar de ojos no se les habría ocurrido ni a los guionistas de Falcon Crest (ni imaginarme quiero a Angela Channing en manos de los guionistas de El Juego de tu Vida).

Se disfruta como chancho en charca durante la emisión, pero cuando ésta acaba uno no puede evitar preguntarse si el que no vayan a poder currar más en ningún lao por haber estafado o el que se queden más solos que la una por haber admitido infidelidades (en el mejor de los caso) u odio por familiares compensa con el premio de 100.000 leuros que con impuestos queda en algo como 75.000 leuros. Yo propongo que con ese dinero se compren una autocaravana y se larguen a alguna aldea keniata donde no hayan oído hablar nunca de ese chisme del mal que es la televisión.

Todavía espero que llegue el día en el que tras el "eso es..." la voz en off continúe con un "mú fuerte, Carmen".