Se habla mucho y muy mal de la cirugía estética, pero en ocasiones es la única salida. En Britney Spears ha obrado un milagro. ¿Quién podía imaginar, después del espectáculo de la clínica de rehabilitación, ver a Brit parecerse en lo más mínimo a la chica inocente a la par que putoncia que una vez fue?

Su paso por un centro de cirugía estética en Las Vegas nos devuelve, como poco, a la Brit del 2004. Eso sí, viene preparada para la vida moderna, ha aprovechado la grasa que le han quitado de la papada para ponerse un culo king size... ¿querrá seguir el ejemplo de su ex marido y conquistar el mercado Hip-Hopero?

Se le ha podido ver machacarse en el Millenium Dance Studio. Esto hace pensar en un ultimátum de la discográfica, como ya pasó con Janet Jackson. Está visto que es lo único que funciona con las divas del pop reconvertidas a oseznas.

¿Serán de pladur las abdominales y lo que hace en el Millenium Dance Studio es comer galletas?

Pues porque sus sofisticados estilismos y sus pelucas la delatan, que si no, como para reconocerla

J-Lo meets Dolly Parton